La calibración frecuente y el mantenimiento preventivo mantienen su sistema de prueba en las mejores condiciones y asegura que sea capaz de producir resultados confiables.
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Hay muchas razones por las cuales se debe calibrar su sistema de prueba, principalmente, porque la calibración se realiza para garantizar que su sistema de prueba esté funcionando correctamente de acuerdo a los requisitos establecidos.
Ya sea que estos requisitos estén definidos por ley, regulaciones gubernamentales, regulaciones de la industria o el sistema de calidad de su propia empresa, las organizaciones reconocen la importancia de calibrar los sistemas a intervalos regulares.
El resultado de utilizar un sistema de prueba no calibrado es que podría estar produciendo resultados inexactos; esta inexactitud puede llevar a que se rechacen productos que cumplen o que se liberen productos que no cumplen las especificaciones establecidas. En última instancia, el usuario final podría reconocer estos resultados como una mala calidad del producto que afecta directamente el rendimiento del material.
La decisión de calibrar está relacionada directamente con el nivel de riesgo que su organización está dispuesta a asumir o la exactitud de los resultados necesarios. Calibrar su sistema de prueba le proporciona la confianza de que este está funcionando de acuerdo a las especificaciones establecidas.
Al calibrar su sistema de prueba, se asegura que esté funcionando dentro de los requisitos de exactitud necesarios y estas condiciones pueden ser establecidas por una organización como la Sociedad Americana de Pruebas y Materiales (ASTM), la Organización Internacional de Normalización (ISO), por su propio sistema interno de Gestión de Calidad de la compañía.
La calibración de su equipo también puede proporcionarle información sobre el rendimiento de su sistema de prueba y al igual que el mantenimiento preventivo en el equipo, calibrar a intervalos regulares puede exponer problemas ocultos del sistema que, si no se abordan, podrían provocar fallas repentinas.
La calibración frecuente y el mantenimiento preventivo mantienen su sistema de prueba en las mejores condiciones y asegura que sea capaz de producir resultados confiables.
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